Las mujeres siempre nos morimos por putas

Supongo que si un día me matan,
será mi culpa.
Por haberme vestido como quiero,
por haber salido de mi casa,
por haber viajado en bici,
por haber llegado en metro,
por haber pedido otra,
por haber estado sobria.

Supongo que si un día me matan,
es porque sonrío y hablo con extraños,
porque me gusta verlos a los ojos;
besarlos.
Porque termino acostándome con ellos
sin saber cómo se llaman
o si vamos a volver a hablarnos.

Supongo que si un día me matan,
será porque me gusta respirar mi libertad,
ser independiente,
ambiciosa,
cambiar la vida de la gente,
sentir pasión por lo que hago,
por darle prioridad a ciertas cosas
y mandar con seguridad otras al carajo.

Ahora resulta
que no soy dueña de mis gustos,
que no soy dueña de mi tiempo.
Que soy esclava de miradas
y susurros que critican
lo que entra o sale de mi boca.
Lo que pongo encima
de mi cuerpo.

Supongo que si un día me matan,
será por haber defendido lo que pienso,
por denunciar las atrocidades en mi contra,
por haber hecho lo que quiero,
por haberme negado a ser otra.

Pero también supongo que si un día muero,
no habrá mucha diferencia.
Que no importa lo que haga
será siempre mi culpa:
las mujeres siempre nos morimos por putas.

2017/05/07