Te escribiré sin escribirte
porque así me lo pediste.
Preguntándome entre sueños
si hubo algo que dijiste
que quizá ya no recuerdo.

Volveré al primer día que me viste 
y buscaré cada palabra
tratando de escuchar
lo que nunca prometiste.

Iré buscando ese silencio;
uno que olvidaste en nuestra cama
aquel día que no volviste.

¿Y cómo haber sabido
que jamás regresarías?
Que después de lo vivido
no habría reto que seguir.
Que la oscuridad de nuestro amor
ya no tendría sentido.

Tonto de mi parte,
pues debí haberlo sabido:
quien en secreto te pronuncia,
te mantiene siempre en el olvido.

¿Y ahora quiénes somos?
Dos desconocidos 
queriendo pretender 
que se pueden desnudar
y volver a ser buenos amigos.

Eres sólo un niño,
y yo me enamoré
queriendo suponer
que esta vez sería distinto.

Te escribiré sin escribirte,
porque así me lo pediste.
No sabré si el tiempo transcurrido
ha sido suficiente
o si necesito tenerte aquí conmigo.

Regresaré para encontrar el trazo
de lo que originalmente caminamos
y guardaré los besos que me diste
para envolverlos en abrazos.

No sabré dónde buscarte,
sino hasta que en mi almohada
sienta tu respiro.
Dejaré morir en mi cabeza
la razón de mi delirio.

Te escribiré sin escribirte
porque así me lo pediste.
Dejaré secar al aire 
los momentos que me diste,
y guardaré esperanza 
en que el viento los regrese
del lugar donde viniste. 

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Julio 28, 2021.