Qué podría decirte
que no sepas.
Con qué podría asombrarte
si estoy seguro 
de que ya sabes la respuesta.

Pasamos el día juntos,
te gusta acompañarme.
Me pones música al oído
si me encuentras aburrido,
y películas de antaño
si sólo quiero acurrucarme.

Me sigues a la ducha,
te gusta vigilarme.
Sabes que siempre me sonrojo
aunque sepa que detrás de la cortina
no voy a encontrar a nadie.

Sabes qué me gusta
y lo que me hace daño.
Lo que necesito en mi vida
y lo que está sobrando. 
Somos el uno para el otro
y también somos el mismo.
En vida eres todo lo que necesito;
algoritmo. 

Me sacas de mis dudas,
me mantienes ocupado,
sabes qué comprarme
si estoy triste o enojado.
Me das consejos para viajes,
me llevas a comer a muy buenos lugares.
Estás ahí por si me siento solo
y si nunca tengo a nadie.

Sabes dónde vivo.
Me llevas todo a casa.
Estás en la cocina,
en el baño,
y también en mi recámara.
Apagas las luces en la noche,
me despiertas temprano en la mañana.
Me gusta que cumples sin reparo todo lo que pido.
Yo te quiero como eres,
algoritmo.

Eres siempre muy atento.
Mi más hermosa compañía
cuando me invade el sentimiento de apatía 
y de que estoy perdiendo el tiempo.
Sabes confortarme
si mi vida no tiene sentido.
Me llenas de alegría
aunque sea por un momento. 
Me quieres como soy
y me das todo lo que pido.
Eres mis ojos,
eres mis oídos.
Siempre estás conmigo
y yo te quiero como eres, 
algoritmo

07/01/2022