El silencio es una canción que siempre va muy bien

El silencio es una canción que siempre va muy bien.
Con un poco de vino,
con un poco de sexo.
Como navegar por el desierto
de lo que pasa alrededor
sin mover un dedo. 

Sentir el universo
en movimiento.
Recorrer la oscuridad
como si estuviera ciego.

Como muy buena serpiente:
los aromas toman forma
con solo saborear el viento.

Shhhh….

Películas en blanco y negro,
y algunas no nos dicen nada.

Shhhh…

El silencio es una balsa
en la que uno se recuesta 
mientras siente por debajo
los minutos transcurrir.
¿Qué sucede mientras tanto?
¿Qué hay en aquello que no suena?
¿No hace eco?
Y aun así escuchamos
cómo retumba en la cabeza,
cómo suena el corazón.

Taladrando.
Una y otra vez.
Taladrando.

Queriendo alcanzar el fondo
de algo que por sí solo
está vacío.

Shhh….
 
Las palabras van adonde las lleva el tiempo.
Así es.
Son murciélagos
buscando insectos en la noche
para su mejor momento.

El silencio es una canción que siempre va muy bien
con un poco de insomnio.
Pensamientos que vuelan como aviones
de un lugar a otro.
Sin origen ni destino.
¿Quién va adentro?
¿Qué estarán diciendo?
Un vals que es mejor bailar despierto.

El silencio es una canción que siempre va muy bien
si la escuchas desde cero.
Sin interrupción.
Sin sobresaltos.
El bullicio de la ausencia 
colándose bajo la puerta
sin ningún reparo.

El silencio es una canción que siempre va muy bien,
aunque muchas veces
nunca sepas
cómo acaba.
y dónde empieza,
y cómo es que de repente
quedaste sumergido
sin darte cuenta.

01/04/2022